Milano

Ale+Ale fueron hallados en un cestillo abandonado en el canal de Martesana, enredado entre un nido de patos y un neúmatico. Su infancia transcurrió bajo la protección de una familia de garzas. Cuando eran muy pequeños aprendieron a dibujar con plumas de pájaro, retratando a cuervos y cigüeñas. De aquí surge su pasión por la ilustración, que les ha llevado a trabajar para los principales editores italianos de libros y revistas. Ambos están unidos a la ciudad de Milán por profundas raíces y a ella le deben sus estudios artísticos y su conocimiento del mundo del trabajo. Para la realización de este libro han caminado mucho por la ciudad sacando numerosas fotos, tomando apuntes, sufriendo amenazas de vigilantes, volviendo una y otra vez a los mismos lugares, evitando otros, escuchando a las estatuas, perdiendo trenes y, en fin, perdiéndose en la niebla. Han mezclado dibujos, fotos y recortes para tratar de alcanzar el alma de Milán, tan escurridiza y silenciosa como un mochuelo en la noche. Tras haber nidificado en distintas zonas de la ciudad, y con el fin de obtener una visión externa y objetiva de Milán, recientemente han levantado el vuelo siguiendo a una bandada de aves migratorias que se dirigía hacia el norte.