Balthus. Meditaciones de un caminante solitario de la pintura

Balthus. Meditaciones de un caminante solitario de la pintura
No puedo responderle. La pintura es un lenguaje en sí mismo. Es el que yo utilizo y es intraducible.
Todo lo que podemos recoger, al filo de una serie de conversaciones que se dieron fragmentariamente entre tazas de té y pastas, son las oleadas de recuerdos de una larga vida de artista recientemente sumergida en el corazón de las capitales y de la vida cultural, y más a menudo retirada en ermitas solitarias. Sólo podemos consignar una serie de reflexiones y de aforismos, tan lacónicos como incisivos, que resumen su filosofía y su visión de la pintura; y retener algunas de las consideraciones sobre el estado de las artes plásticas en una época de la cual, en verdad, jamás se ha sentido parte
Todo lo que podemos recoger, al filo de una serie de conversaciones que se dieron fragmentariamente entre tazas de té y pastas, son las oleadas de recuerdos de una larga vida de artista recientemente sumergida en el corazón de las capitales y de la vida cultural, y más a menudo retirada en ermitas solitarias. Sólo podemos consignar una serie de reflexiones y de aforismos, tan lacónicos como incisivos, que resumen su filosofía y su visión de la pintura; y retener algunas de las consideraciones sobre el estado de las artes plásticas en una época de la cual, en verdad, jamás se ha sentido parte