Jim Morrison. El poeta del caos

James Douglas Morrison se bebió los sesenta y murió en una bañera de París el 3 de julio del 71, a la edad de 27 años. Morrison se había alejado de la música y había huido del escándalo y la fama encontrando cobijo en París y en la poesía. Sus últimos meses con los Doors mostraban a un chaval perdido y alcoholizado al que ya nada le importaba demasiado. La intensidad voraz con la que vivió su vida lo convirtió en uno de los iconos más rebeldes de la cultura popular, representante de la brecha generacional y la contracultura juvenil de los sesenta y setenta. A través de recuerdos y canciones, Bertocchini esboza la vida de este genio que sigue fascinando a los jóvenes de las nuevas generaciones.