Les nostres recomanacions i propostes

Una vaquera calza sus botas, fuera hace frío pero sabe que su cuerpo se dirige hacia un espacio cálido, un lugar de envoltura y plegamiento. Aquí, el tiempo y el espacio se tornan xenomorfos y liminales: la vivencia con el entorno provoca extrañamiento y enajenación pero no indiferencia, de tal modo que el cuerpo y la carne que lo constituye reacciona, obedeciendo a razones que ni él mismo puede plantearse. Esto que se hace es una forma de vida y un acto de resistencia: en un giro pasoliniano de los acontecimientos, con una mano se biografía un testimonio de vida, mientras que con la otra se sigue el ritmo acelerado de los beats. Esto es Raving, la nueva novela de Mckenzie Wark.
Pero, cuando hablamos de cultura rave ¿a qué nos referimos exactamente? Podríamos decir que, desde sus orígenes en Detroit en los años ochenta, se ha extendido por Europa como si de un fantasma-virus se tratase. Entre lo subterráneo, lo xenomorfo, lo intensivo y lo maquínico, vemos lo rave como una nueva forma de concebir el sonido y la vivencia ligada a él. Contestar a esta pregunta es la tarea que se plantea McKenzie Wark en Raving.