La ciudad feliz


La ciudad feliz

La génesis de esta novela es similar a la novela anterior de Elvira Navarro, La ciudad en invierno. Conformada por dos nouvelles, ambas relatan el territorio de la infancia, una desde el punto de vista de un niño chino inmigrante, la otra desde el punto de vista de una niña que está fascinada por un vagabundo. La primera historia, cuenta la relación de amistad de la niña con un chino. Centrada en la historia del chino, en la historia de su familia y del negocio que regentaban en España. El territorio de la infancia está abordado por una narradora fina y visceral que además sitúa -en un primer plano- la ciudad como marco de las relaciones más íntimas. Allí donde las calles desconocidas representan lo posible, la aventura, la oscuridad, la injusticia, la vida. La novela, sin embargo, no trata de la ciudad per se, sino, de las relaciones entre los niños y los adultos, y de los mundos que los adultos abren o cierran a sus infantes. Son temas muy reales que se abordan de manera poco autobiográfica pero sí de forma muy cercana al lector.