Espejos, laberintos, bibliotecas y otras cifras: la estética de B

Hablar de la obra de Borges puede multiplicarnos porque está llena de espejos o puede llevar a la locura dado que encierra un laberinto múltiple e ilimitado, puede debelarnos una isla que terminará siendo Inglaterra o descubrir para nuestro horror que somos el sueño del otro que nos sueña o tal vez lo soñamos con la sombra que es del tigre o de la rosa.